Declaración Universal de Derechos Humanos
La Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH) es un documento clave en la historia de los derechos humanos. Preparada por representantes de diferentes orígenes jurídicos y culturales de todas las regiones del mundo, la Declaración fue proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en París el 10 de diciembre de 1948 como un estándar común de logros para todos los pueblos y todos Naciones. Define, por primera vez, los derechos humanos fundamentales que deben protegerse universalmente.
Fuente: UNIC Rio – Centro de información de las Naciones Unidas en Río de Janeiro, diciembre de 2000
OBS: El vínculo activo entre los medios de comunicación, las instituciones educativas, las organizaciones no gubernamentales y las Naciones Unidas, los UNIC ofrecen no sólo información actualizada sobre cuestiones políticas, económicas, sociales y humanitarias, sino que también promueven seminarios y foros con el fin de sensibilizar al público sobre una mayor participación.
Declaración de Hamburgo sobre educación de adultos
La Conferencia de Hamburgo (CONFITEA V), patrocinada por la UNESCO en 1997, representa un hito importante, ya que estableció la vinculación de la educación de adultos con el desarrollo sostenible y equitativo de la humanidad.
«(…) Sólo el desarrollo centrado en el ser humano y la existencia de una sociedad participativa, basada en el respeto integral de los derechos humanos, conducirán a un desarrollo justo y sostenible. (…) La educación de los adultos, en este contexto, se convierte en algo más que un derecho: es la clave del siglo XXI; Es tanto una consecuencia del ejercicio de la ciudadanía como condición para la plena participación en la sociedad. (…) La educación de adultos puede modelar la identidad del ciudadano y dar sentido a su vida «(Declaración de Hamburgo, 1997 apud SESI/UNESCO, 1999, p. 18).
Fuente: SESI – UNESCO, 1999
Declaración Mundial sobre la Educación para Todos:
Satisfacer las Necesidades Básicas de la Aprendizaje
Durante más de 40 años, las naciones del mundo han afirmado en la Declaración Universal de Derechos Humanos que «toda persona tiene derecho a la educación». Sin embargo, a pesar de los esfuerzos realizados por los países de todo el mundo para garantizar el derecho a la educación para todos, persisten las siguientes realidades:
- Más de 100 millones de niños, de los cuales al menos 60 millones son niñas, no tienen acceso a la educación primaria;
- Más de 960 millones de adultos, dos tercios de los cuales son analfabetos, analfabetismo funcional y un problema importante en todos los países industrializados o en desarrollo;
- Más de un tercio de los adultos del mundo no tienen acceso a conocimientos impresos, nuevas habilidades y tecnologías, lo que podría mejorar la calidad de vida y ayudarles a realizar y adaptarse a los cambios sociales y culturales;
- Más de 100 millones de niños e innumerables adultos son incapaces de completar el ciclo básico, y millones más, a pesar de completarlo, no adquieren conocimientos y habilidades esenciales.
Como resultado, los participantes de la Conferencia Mundial sobre la Educación para todos, reunidos en Jomtien, Tailandia, del 5 al 9 de marzo de 1990, recordaron que la educación es un derecho fundamental de todos, mujeres y hombres, de todas las edades, en todo el mundo.
Fuente: JOMTIEN, 1990 Apud UNESCO, 1998